Hace algunos días vi un vlog de Casey Neistat en el que hablaba sobre su perspectiva de la productividad y como se dividían entre diferentes tipos de actividades las horas de su día. Se me hizo muy interesante ya que yo tengo una división de mi día muy peculiar, a diferencia de la mayoría de las personas no tengo un horario fijo ni la necesidad de estar todo el tiempo en la oficina, sin embargo tengo establecida una rutina para dividir mis horas de trabajo que quiero compartir a continuación.

Voy a empezar diciendo que soy una persona altamente productiva, no sólo por las horas que destino a trabajar durante el día sino porque trabajo muy rápido. Viendo trabajar a otros en actividades similares me puedo comparar y sé que soy hasta el doble de rápido que la mayoría de las personas con las que he tenido oportunidad de colaborar. Esto me permite hacer más actividades que los demás y trabajar en múltiples proyectos al mismo tiempo. Tengo desde hace años un estudio creativo digital, recientemente inicié junto a mis socios una segunda empresa que es un estudio de innovación y diseño, además de esto Nydia y yo tenemos una plataforma de promoción de eventos y lugares culturales y de entretenimiento en redes sociales y aunado a todo esto necesito tiempo para mis proyectos personales y mis hobbies (que son bastantes). Hasta ahora he logrado cumplir con todos mis compromisos gracias a la velocidad con la que trabajo, misma que no es una habilidad especial, es simplemente una gran capacidad de concentración en la tarea que tengo enfrente. Cuando estoy en modo de concentración no puedo interactuar con los demás, no puedo interrumpir lo que estoy haciendo para platicar o escuchar lo que alguien tiene que decirme, tengo un sólo objetivo que es terminar la tarea de ese momento. Es por esa forma de concentración que para mi en particular no resulta fácil trabajar en una oficina, susceptible a interrupción y vulnerable a las peticiones de atención de terceros. Por esto la mayoría del trabajo que hago la realizo desde mi casa, si voy a la oficina a ver pendientes, reunirme con mi equipo de trabajo y ofrecer retroalimentación cara a cara todos los días pero la mayor parte del tiempo necesito estar fuera de la oficina para completar mis actividades.

Yo sé que esto de no tener un horario fijo y no pasar mucho tiempo dentro de una oficina no es para todos, hay quienes necesitan una metodología de trabajo más tradicional o quizá más estructurada, aunque como presentaré a continuación hay bastante estructura e intención detrás de mi forma de trabajar. No es algo que ideé, es una forma de dividir el tiempo que fue surgiendo a lo largo de los años y que se volvió una rutina que me funciona bastante bien.

Horas

  • Mi día normalmente empieza a las 7AM, me gusta tomar un café y ponerme a contestar correo, revisar pendientes y organizar actividades para el día. Esto me toma dos horas.
  • De 9 a 11AM entreno. Me gusta correr, es algo que empecé a hacer hace unos años y que se ha vuelto una parte muy importante de mi vida, me lo tomo muy en serio y es mi pasión. Mi entrenamiento es sagrado, es la parte que menos estoy dispuesto a mover o cambiar de mi día, no me puede faltar. Entrenar me mantiene saludable, me ayuda a manejar el estrés, me da disciplina y propósito. Este tiempo lo uso para correr e ir al gimnasio, a veces sólo correr, en ocasiones en las que tengo que correr distancias largas puede ser más tiempo. Todas las demás actividades del día deben girar en torno a ésta, reuniones, citas, visitas y otros compromisos los programo para que no se interpongan con mi entrenamiento. La hora en la que entreno es además importante, después de probar muchas horas para entrenar he descubierto que para mi ésta es la perfecta ya que tengo un par de horas despierto, estoy en plena actividad sin estar cansado y es suficientemente temprano para que no interfiera mucho con mis actividades.
  • Después de entrenar trabajo, de preferencia esta parte del día la llevo a cabo desde casa.
  • Tomo un par de horas del día para comer con Nydia, he hecho el propósito de siempre comer con ella. Vemos algo de televisión mientras comemos, descansamos un poco, lavo los trastes y hago algo de limpieza en la casa.
  • Por la tarde trabajo, aquí aprovecho para ver pendientes en la oficina. También intento programar todas mis citas y reuniones en este bloque ya que para la tarde los pendientes más urgentes del día ya están resueltos.
  • Pasear a los perros es una actividad que intento hacer diario, no siempre es posible y cuando no lo es se debe a que se juntas los dos bloques de trabajo de la tarde y noche en uno solo. Pero si trato de hacer esto diario, sacarlos una hora al parque, porque es bueno para ellos y me ayuda a despejar la mente.
  • El último bloque de trabajo en la noche son dos horas pero muchas veces se extiende hasta tres y es un periodo de alta concentración. Aquí es donde aprovecho para resolver problemas complejos o llevar a cabo las tareas más pesadas del día.
  • Después tengo tres o cuatro horas para mí, ver televisión, leer, revisar mis redes sociales, escribir o hacer cualquier actividad relacionada a mis proyectos personales.

Estimo que en un día normal trabajo alrededor de 10 horas, que me rinden bastante gracias al ritmo en el que trabajo. La ventaja de tener el día dividido de esta manera para mí es evitar espacios de tiempo mayores a tres o cuatro horas trabajando. Los bloques entre los espacios de trabajo me permiten despejar mi mente y recargarme. Dividí con colores el horario (arriba) para que el rojo representara trabajo y el azul tiempo personal, el entrenamiento esta en otro color ya que es tiempo personal en el que en realidad estoy trabajando ya que muchas de las ideas que tengo, soluciones de problemas y estrategias las hago justamente en este periodo de concentración en el que mi mente esta trabajando igual de intensamente que mi cuerpo.

Esta rutina nunca se vuelve tediosa ya que se da de forma natural y no es estricta. Hay ocasiones en las que necesito trabajar para solucionar algo cinco horas seguidas y los tiempos se ajustan, hay otras ocasiones en que no me puedo concentrar y necesito tomarme una mañana o una tarde libre.

Los fines de semana son mucho menos estructurados, aunque trato de no trabajar mucho siempre hay algunas horas de trabajo que se realizan durante el fin de semana, generalmente mientras espero para realizar alguna actividad o mientras estoy desocupado.

Algo que siento que me ayuda mucho a conservar un ritmo de trabajo intenso es la versatilidad de lo que hago. Actualmente mi tiempo de trabajo se divide más o menos así:

  • 30% en creatividad (diseñar, buscar soluciones a problemas, hacer planes y estrategias)
  • 30% en producción (desarrollo web y generación de contenidos)
  • 30% en administrar (distintas labores administrativas derivadas de mi trabajo)
  • 10% en relaciones públicas (funcionar como un enlace con los clientes)

Trabajo

Estos porcentajes se han venido dando de forma natural y me han permitido tener un buen balance entre trabajo para el que se requiere inspiración (60% de creatividad y producción) y trabajo para el que no se necesita inspiración (40% de administración y relaciones públicas). De esta forma en el momento en que no me sienta inspirado puedo cambiar a las actividades que no necesitan que este inspirado y viceversa.

Cuando empecé mi estudio (LABPROY) lo inicié como un lifestyle business, es decir que la idea central de como funciona es que me permita tener el estilo de vida que deseo en cuanto a economía de dinero y de tiempo. Nydia y yo somos el motor principal de ese negocio pero podemos trabajar desde cualquier parte del mundo en la que estemos, somos dueños de nuestros tiempos y horarios. Con el nuevo estudio de DEMENTE hay una estructura más formal, hay socios, oficinas y empleados pero aquí yo no soy el motor principal, soy un engrane, por lo tanto puedo seguir trabajando desde cualquier parte del mundo y ser dueño de mis tiempos y horarios sin que esto dañe la estructura del negocio. Esta libertad es lo más importante para mi, nunca participaría en un negocio o crearía una empresa que me exija mantener un horario fijo en una oficina, yo simplemente no puedo trabajar de esa forma y además de no poder no lo disfruto.

Administrar de forma personal el tiempo de trabajo y establecer prioridades es difícil para muchas personas, por eso entiendo que esta forma de trabajar pueda parecer desorganizada o complicada, pero como dije en un principio, trabajando de esta forma soy altamente productivo. Estoy seguro de que la baja productividad de muchas personas se debe a que están atrapados en un esquema laboral que no es ideal para ellos. No todos somos iguales, no todos aprendemos de la misma forma y no todos trabajamos de la misma forma.